lunes, 10 de enero de 2011

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COREA

Península De Corea: Corea del Norte (comunista a la China) Corea del Sur (capitalista)

De siempre me ha interesado la palabra Corea. De pequeño, cuando niño, vivía al lado de unos bloques de pisos que en el barrio se conocían como Corea. Eran unos edificios, iguales o muy similares a otros del barrio, donde vivían militares norteamericanos. Los chavales íbamos a jugar a Corea, a comprar al Wollworth y a mirar por las rendijas de las cortinas de los puticlubs que había en la calle doctor Fleming. Poco a poco se fueron los militares americanos, cerró Wolworth y terminaron desapareciendo los puticlubs. Dejamos de ir a jugar a esa zona del barrio que terminó siendo habitado por españoles, madrileños y algún extranjero nada que ver con el ejercito norteamericano. De más mayor he consumido muchos productos que en su etiquetado ponía Made in Corea. Ordenadores, y electrodomésticos varios sobre todo.

Ahora que ya soy casi viejo, tengo más de cincuenta años, escucho y leo que las tensiones entre las dos Coreas están a punto de iniciar otra guerra, con gran júbilo de medios de comunicación, a los que al parecer las guerras les interesa un montón. Máxima tensión entre las dos Coreas es lo más neutral que se ha podido escuchar en los medios de comunicación españoles. Un “conflicto” hinchado artificialmente por los titulares de prensa, cuyo origen está en unas maniobras militares de uno y una respuesta singular de los otros. Norte y Sur, lo de siempre, que si esta isla es mía, que si te lanzo unos misiles, que si hundimos un barco, étc, étc. Una historia que viene de la Segunda Guerra Mundial donde se decidió partir la Península de Corea y donde siempre había habido una nación, estado o país, se hicieron dos: Corea del Norte y Corea del Sur. La del Norte muy cerrada y atrasada tecnológicamente hablando, comunista, y la del Sur muy abierta y avanzada, totalmente capitalista.

Pero hete aquí que la televisión pública española tiene un programa llamado Españoles por el Mundo. Hace unos días le tocó el turno a Seúl, capital de Corea del Sur, que está a menos de 200 kilómetros de Pyongyang, la capital de Corea del Norte, la comunista, la mala según todas las noticias servidas. Es un programa blanco que nos cuenta con gran variedad de imágenes lo que hacen los españoles en esa parte del mundo, sin trampa ni cartón.

Manuel, salmantino, lleva dos años en Seúl buscando negocios para empresas españolas, Moisés da clases de español, Manolo trabaja para Samsung y se ha casado con una coreana, Laura, comercial que trata de vender producto español, Fernando un maño que da clases en la Universidad de Hankuk, Sara Santamaría es profesora, Iñigo, comercial y Juan Manuel cocinero español que se dedica a hacer paellas a los coreanos. Todos ellos retratados en su entorno, haciendo de cicerones de una gran y espectacular ciudad, Seúl, divertida, interesante, chocante y tranquila. Repleta de coreanos que van a su bola, ajenos a los titulares de la prensa occidental.

El programa de una hora de duración permitió ver decenas de calles repletas de gente, mercados, monumentos y lugares de interés. Enseñaron la vida sosegada y activa que llevan los coreanos que viven en Corea del Sur, ajenos a las máximas tensiones que dicen se vive en esa parte del mundo.

Seúl es la segunda ciudad más habitada del mundo, con diez millones de habitantes, y la verdad es que la versión que nos dieron estas microrealidades españolas en Corea está muy distante de la “máxima tensión” que, dicen los periodistas, reina en la zona. Los coreanos ven por la tele las telenovelas al uso, hacen deporte, bailan y danzan a diario con pasión y orgullo por pertenecer a la catorceava potencia del mundo desarrollado. En 2007 se inauguró una línea de ferrocarril que une las dos Coreas, la del Norte y la del Sur. En fin que si finalmente aciertan los medios de comunicación con lo de la guerra sería una sorpresa tremenda para todos, hasta para sus habitantes, los del Norte y los del Sur.

Cándido San

2 comentarios:

  1. Yo de la TV no me creo nada, ni las noticias ni los empalagosos programas de reportajes de los españoles, madrileños o anadaluces que viven en otras partes del mundo.
    Pobres coreanos del Norte, allí opasan hasta hambre porque son comunistas raros, raros, raros.

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  2. Cándido, dejaste de ir por el barrio de Corea cuando los puti clubs cerraron, eh pillin, que se te ve el plumero.
    Date una vuelta por Seúl y veras lo que es aquello, parece New York, de tantas edifcios y tan altos que tiene la ciudad.

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